El email marketing es una de las estrategias más efectivas para comunicarte con tu audiencia y generar conversiones. 

Sin embargo, para que tus correos electrónicos cumplan su objetivo, es necesario que los destinatarios los abran y los lean. Por eso, la tasa de apertura es una métrica clave que debes optimizar.

La tasa de apertura es el porcentaje de correos electrónicos que han sido abiertos con relación al número de ellos que han sido entregados. Se calcula de la siguiente manera:

La tasa de apertura promedio varía según la industria, el tipo de correo y el segmento de audiencia, pero se estima que ronda el 21,33%. Si quieres mejorar esta cifra y lograr que tus correos capten la atención de tus contactos, te recomendamos seguir estos consejos que agrupamos en tres categorías.

1. Construcción de la lista y primeras impresiones

Desde evitar trampas legales hasta crear conexiones genuinas, descubriremos cómo construir una lista que no solo cumpla con las normativas, sino que también impulse la participación y la confianza de tus suscriptores.

No des dinero a cambio de bases de datos:

No compres ni alquiles bases de datos, es ilegal y además perjudica tu reputación y tu entregabilidad. Lo mejor es que construyas tu propia lista de contactos con personas que hayan dado su consentimiento para recibir tus correos.

Confirma la captación:

Usa el doble opt-in en la captación. Esto significa que cuando alguien se suscriba a tu lista, le enviarás un correo de confirmación para que valide su dirección. Así te aseguras de que tu lista está compuesta por contactos reales y activos.

Correos de bienvenida: 

Envía un correo de bienvenida en las primeras 24 horas. Cuando alguien se une a tu lista, es el momento ideal para establecer una relación de confianza y fidelidad. Un correo de bienvenida personalizado y atractivo puede aumentar la tasa de apertura hasta en un 86%.

Personalización:

Personaliza el remitente con nombre de persona. Los correos que vienen de una persona real generan más confianza y cercanía que los que vienen de una empresa o una dirección genérica. Usa el nombre de alguien de tu equipo o el tuyo propio como remitente, y firma el correo con el mismo nombre.

Ahí lo tienes, los cimientos para construir una lista sólida y dejar una impresión duradera. Recuerda, cada suscriptor es una oportunidad de conexión genuina. ¡Prepárate para transformar tu estrategia de correo electrónico y dejar una marca positiva desde el principio!

2. Contenidos relevantes y evasión de obstáculos

Aquí, nos sumergimos en la creación de contenidos que no solo cautivan, sino que también esquivan obstáculos para llegar directo al corazón de tus suscriptores. Desde asuntos irresistibles hasta los filtros de spam.

Asuntos irresistibles:

Crea un asunto con gancho (pero sin caer en el clickbait). El asunto es el primer elemento que ven tus contactos y el que determina si abren o no tu correo. Por eso, debe ser breve, claro, relevante y llamativo. Evita usar palabras engañosas o exageradas que puedan decepcionar al lector.

Contenidos relevantes:

Ofrece contenido de calidad y valor. Tus correos deben aportar algo útil e interesante a tu audiencia, ya sea información, entretenimiento, educación o solución a un problema. Además, el contenido debe estar bien redactado, estructurado y adaptado al tono y estilo de tu marca.

Esquiva el spam:

¡Evita los filtros de spam! Hay ciertas prácticas que pueden hacer que tus correos terminen en la carpeta de correo no deseado, como usar palabras como gratis, garantizado, urgente, o escribir en mayúsculas o con muchos signos de exclamación. También debes evitar enviar archivos adjuntos o imágenes demasiado pesadas.

Categoriza tus contactos:

Segmenta tu lista de contactos. No todos tus contactos tienen los mismos intereses, necesidades o preferencias. Por eso, es importante que los clasifiques en grupos según sus características y comportamientos, para enviar correos personalizados y adaptados a cada segmento.

Hemos explorado las estrategias para cautivar con tus asuntos, ofrecer contenido valioso y sortear los obstáculos que podrían entorpecer tu mensaje, ¡continuemos con las consideraciones finales!

3. Estrategias para campañas efectivas y consideraciones finales

Los siguientes consejos son claves para asegurar que tus campañas no solo sean efectivas, sino también que dejen una impresión duradera. ¿Listo para llevar tus campañas de correo electrónico al siguiente nivel?

Pruebas A/B:

Realiza pruebas A/B en tus campañas. Una forma de optimizar tus correos es hacer experimentos con diferentes versiones de los mismos y medir cuál tiene mejor rendimiento. Puedes probar diferentes asuntos, remitentes, contenidos, diseños, llamadas a la acción, etc.

Atención al CTA:

Incluye un CTA efectivo, el objetivo de tus correos es que tus contactos realicen una acción, ya sea visitar tu web, descargar un recurso, comprar un producto, etc. Por eso, debes incluir un botón o un enlace que les invite a hacerlo, con un texto claro, visible y persuasivo.

Ajusta la frecuencia:

Modera la frecuencia de tus envíos, no quieres saturar a tus contactos con demasiados correos, pero tampoco quieres que se olviden de ti. Lo ideal es que encuentres un equilibrio entre la cantidad y la calidad de tus envíos, además de respetar las preferencias de tus contactos.

Sé oportuno:

Elige el momento adecuado; no todos los días ni todas las horas son iguales para enviar tus correos. Hay factores como el sector, el público, el tipo de correo, etc., que influyen en el momento óptimo. Lo mejor es que analices los datos de tus campañas y pruebes diferentes horarios.

¡Y listo! Estas fueron las estrategias clave para unas campañas efectivas y las consideraciones finales para dejar una marca positiva. ¿Necesitas una mano extra para ejecutar o plantear tu estrategia de email marketing? Siempre puedes contar con CmásD, hablemos…